Usted necesita cuidarse bien, especialmente para proteger su salud durante la radioterapia. Su médico o enfermera le orientarán sobre su tratamiento y los efectos secundarios que podría tener. A continuación se dan otros consejos prácticos:
- Asegúrese de descansar lo suficiente: Puede ser que sienta más cansancio de lo normal. Procure dormir bien durante la noche. El cansancio excesivo o fatiga puede durar varias semanas después de terminado el tratamiento.
- Consuma una dieta balanceada y nutritiva: Según la región del cuerpo que reciba la radiación (por ejemplo, la región del abdomen o el área pélvica), es posible que su médico o enfermera recomienden cambios en su alimentación.
- Cuide mucho la piel del área tratada: Si recibe radioterapia externa, la piel de la región bajo tratamiento puede ponerse más sensible o adquirir la apariencia y sensación de quemadura solar. Consulte con su médico o enfermera antes de usar cualquier jabón, cremas, desodorantes, medicinas, perfumes, cosméticos, talco o cualquier otra cosa en el área tratada. Algunos de estos productos pueden irritar la piel sensible.
- Evite ponerse ropa ajustada sobre el área del tratamiento: Esto incluye fajas, pantalones o cuellos que queden ceñidos. En su lugar, use vestimenta holgada de algodón suave. No almidone sus prendas de vestir.
- No se frote ni restriegue la piel tratada, y no use cinta adhesiva sobre ésta: Si es necesario cubrir o vendar la piel procure que la cinta adhesiva quede colocada fuera de la región de tratamiento, y no se la ponga en el mismo sitio cada vez que cambie el vendaje.
- No aplique calor o frío (como almohadillas térmicas o compresas frías) sobre la región tratada: Consulte primero con su médico. Hasta el agua caliente puede lastimar la piel; por lo tanto, use solamente agua tibia para lavar el área tratada.
- Proteja el área tratada del sol: Puede ser que su piel se vuelva hipersensible a la luz solar. Si es posible, cúbrase la piel tratada con ropa de colores oscuros antes de salir. Pregunte al médico si debe usar alguna crema con protección solar. Si éste lo autoriza, utilice una crema con un factor de protección solar (SPF) de por lo menos 25 y renueve a menudo la aplicación. Continúe con las medidas de protección adicional de la piel contra la luz del sol durante al menos un año después de la radioterapia.